La industria cervecera no fue inmune de ninguna manera a los altibajos de 2020. Tanto las cervecerías como los consumidores cambiaron sus hábitos e hicieron ajustes sobre la marcha. Pero (afortunadamente) algunas cosas se mantuvieron constantes: la preferencia cada vez mayor entre los consumidores por opciones de bebidas más saludables y el impulso para incorporar prácticas sostenibles en toda la industria.
Un examen del apartado de bebidas de cualquier supermercado confirmará rápidamente que los consumidores tienen una enorme variedad de opciones en lo que respecta a la cerveza. Aunque las India Pale Ale (IPA) y las lager tradicionales siguen siendo una opción principal, estas tienen algunas vecinas nuevas en la estantería: desde cervezas con menos de 100 calorías hasta cervezas sin gluten (o incluso sin alcohol) y la variedad cada vez mayor de bebidas carbonatadas alcohólicas. Con tanto para elegir, ¿qué están eligiendo los consumidores?
Obtuvimos la respuesta a esta y otras preguntas clave en un reciente informe de tendencias de DSM que compartió los resultados de una encuesta de bebedores habituales de cerveza en 20 países. Por abrumador que parezca, la tendencia hacia opciones de bebidas más sanas fue fuerte y clara, con un 59 % de los consumidores que dijeron estar preocupados por el aspecto saludable de beber cerveza.
El aumento de peso también es una inquietud clave. Las cervecerías están prestando atención y atendiendo esta demanda con una gama de opciones más ligeras, a la vez que trabajan duro para mejorar su atractivo y garantizar un gran sabor.
A medida que los consumidores toman decisiones basadas en preocupaciones sobre salud y bienestar, también se centran en los ingredientes y en cómo se hacen sus bebidas. Nuestro informe revela que el 54 % está influenciado por las afirmaciones sobre los ingredientes y el 39 % pagará por una cerveza con ingredientes locales. Se trata de una gran oportunidad para los fabricantes de cerveza, y muchos se están sumando para responder a esas necesidades con procesos más sostenibles que ayudan a reducir su huella.
Además, los consumidores están empezando a establecer una conexión entre los ingredientes locales y la sostenibilidad, un factor desencadenante que podría hacer que las prácticas de elaboración de cerveza más respetuosas con el medio ambiente sean la norma y dar paso a una nueva ola de cervezas producidas de forma más sostenible y con el sabor que los consumidores anhelan.
Como socio de mucho tiempo de la industria cervecera, DSM siempre está al día de las últimas tendencias y, a su vez, ayudamos a nuestros clientes de cervecerías a hacer lo mismo.
Por ejemplo, quienes expanden su oferta a la categoría de las bebidas carbonatadas alcohólicas (un segmento en explosión del mercado) ahora pueden recurrir a nuestra solución Maxinvert® para acelerar la producción de bebidas carbonatadas alcohólicas a base de sacarosa. Esta solución enzimática única de invertasa hidroliza la sacarosa en fructosa y glucosa, proporcionando azúcares fermentables al principio de la producción. Esto elimina un retraso (hasta de dos días) que los fabricantes de cerveza suelen experimentar al principio de la fermentación. El uso de Maxinvert® puede reducir el tiempo total de fermentación hasta en un 50 % y, a su vez, aumentar la capacidad de producción y el rendimiento.
Estos beneficios también ayudan a impulsar la sostenibilidad dentro de los procesos de los clientes, ya que la reducción del tiempo de producción requiere menos consumo de energía y contribuye a reducir la huella de carbono.
A medida que la sostenibilidad cobra más prioridad en el sector, DSM observa que los clientes ven las materias primas como un elemento que puede impulsar la eficiencia y reducir los costos. Quienes normalmente elaboran cerveza con maltas tradicionales están explorando más adjuntos: arroz, maíz, sorgo, por citar solo algunos. Las opciones de adjuntos disponibles para los fabricantes de cerveza varían según la zona geográfica y la estación, y también pueden diferir ampliamente en calidad.
Aquí, DSM apoya a los clientes y los ayuda a sacar el máximo partido de sus materias primas sin sacrificar la calidad del producto terminado. Recientemente lanzamos Maxadjunct™ ß L, una enzima para elaboración de cerveza con adjuntos de alto rendimiento. Está dirigida a productores que elaboran sus cervezas con una amplia gama de cereales en lugar de cebadas malteadas. El uso de materias primas sin maltear y disponibles localmente ayuda a impulsar la eficiencia de los recursos y reduce los costos para los fabricantes de cerveza. Pero hay desafíos, por lo que la gama completa de enzimas para elaboración de cerveza con adjuntos de DSM, en colaboración con nuestros maestros cerveceros expertos, trabaja con el proceso único de cada cliente para desarrollar recetas flexibles que se puedan producir de forma sostenible y con una calidad constante.
Esta calidad es, en última instancia, lo que los consumidores saborean cuando eligen una bebida, ya sea una bebida carbonatada alcohólica afrutada, una cerveza ultraligera o una cerveza artesanal elaborada con ingredientes locales. Introducir nuevos productos al mercado que ofrezcan calidad, pero también un sabor de primera y que también respondan a las tendencias actuales, es un desafío para nuestro sector que nos llevará a 2021 y más allá. En DSM estamos a la altura del desafío: siempre innovamos para mantener el ritmo de estas tendencias y trabajamos para desarrollar soluciones oportunas que permitan a nuestros clientes aprovechar nuevas oportunidades con miras a la sostenibilidad.
Aquí en DSM preguntamos recientemente a 1000 bebedores de cerveza, en cuatro continentes, sobre las próximas tendencias como parte de nuestro Reporte de perspectivas globales (realizado de forma independiente).
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8 enero 2021
23 Jul 2021
